viernes, 19 de julio de 2013

Peces marinos con evidencias de cáncer

En general, las enfermedades en peces han sido registradas en especies de valor comercial,  utilizadas en la piscicultura, dado las mayores densidades de animales, lo cual, puede conllevar a altos niveles de infección. Estas lesiones son causadas por patógenos tales como bacterias, parásitos, copépodos, virus y hongos. Sin embargo, investigadores han encontrado pruebas de cáncer y otras enfermedades en peces marinos silvestres, es decir, en el medio natural. 

Una investigación analizó las muestras tomadas en la Gran Barrera Arrecifal de Australia del mero celestial (Plectropomus leopardus), un pez del pacifico occidental que según la lista roja de la Unión internacional para la conservación de la naturaleza está clasificada como casi amenazada (UICN Red list).
  
De acuerdo con los análisis, las lesiones observadas afectan la superficie de los peces, cambiando los  patrones característicos de puntos azules a una coloración negro/café oscuro. También, analizaron las comunidades microbianas asociadas a peces sanos  y peces enfermos. Las identificaciones revelan que los microbios están principalmente en la capa de mucus superficial de los peces y no en las dermis o tejidos musculares, donde se observan las lesiones.

a) 10 % infeccion; b) 90% infeccion  

Por otro lado, al comparar la presencia de las células con melanina (melanosomas) entre los tejidos afectados y sanos, se detectó una mayor densidad, segregación y una distribución más profunda de melanosomas en los tejidos lesionados; por el contrario, en los peces normales, estas células están presentes solamente en la dermis subepitelial, siendo las responsables de los patrones de pigmento.


Este estudio reporta por primera vez un caso de melanoma (cáncer) en peces silvestres. Los investigadores indican que la posible causa es principalmente la radiación UV y en un segundo plano, potenciales contaminantes cancerígenos. Lo anterior es debido a la disminución de la capa de ozono estratosférico permite el aumento de los rayos UV, penetrando a zonas profundas de 60 m, generando efectos perjudiciales para los organismos marinos y de agua dulce, señalado en anteriores estudios. Además, los investigadores señalan evidencias de melanomas en otras especies de peces observado en la misma área de estudio. Por terminar, dado el alto valor de esta especie y la importancia y delicadez de los hábitats arrecifales de la Gran Barrera, es vital un manejo adecuado de estos recursos.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario