miércoles, 18 de junio de 2014

Como preservar los ecosistemas coralinos



La barrera marina artificial más larga del mundo será construida a lo largo de la Península del Yucatán, al sur de Cancún, localizada en el mar del Caribe mexicano con el fin de proteger la barrera coralina y las costas turísticas.


El objetivo de la barrera artificial es de proteger un ecosistema coralino natural y frágil, clasificada como la más grande del hemisferio septentrional y la segunda al mundo, después de la gran barrera australiana. Esta medida, protegerá las 13.450 especies que viven en ese ecosistema. Este es un ejemplo de gestión ambiental, en el cual, han participado 100 expertos entre ingenieros, arquitectos, biólogos marinos y expertos del ambiente. 


La barrea artificial tienes 2 kilómetros de largo, construida con más de un millar de estructuras piramidales con huecos hechas de cemento enriquecido con microsilicio. Serán ubicadas cuidadosamente sobre el fondo marino gracias a maquinarias y buzos expertos.


La estructura y los materiales fueron estudiados con el fin de ser amigos ambientalmente. El objetivo no es solamente preservar el rico ambiente marino que ha soportado  numerosos ataques externos, además a ayudarlos a renovarse, gracias al hecho que nuevos organismos podrán atraparse a la barrera artificial. Es una respuesta a los daños provocados no solo por los factores naturales relacionados al clima tropical de la zona, pero también y sobre todo por las acciones humanas como el rápido desarrollo costero que ha destruido los habitas y acelerado la erosión de los suelos, y el cambio climático global, siendo este último el mayor enemigo de origen antropogénico.


Las barreras coralinas son importantes no solo porque conforman un ecosistema donde se establecen numerosas y diversas especies; asimismo, sirven como defensa de las costas de las olas, de los huracanes y del nivel del agua que está en constante aumento, poniendo en riesgo a las poblaciones cercanas al litoral.